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    La ConfeCat alerta que regular las nuevas modalidades de alojamiento turístico romperá la convivencia con los vecinos

    Con motivo del Decreto de reglamento de turismo de Cataluña que está trabajando el Gobierno catalán, la Confederación Empresarial de Hotelería y Restauración de Cataluña, ConfeCat, alerta nuevamente que la incorporación de nuevas modalidades de alojamiento turístico a las actuales agravará los problemas de convivencia que últimamente han sucedido entre la actividad turística y los vecinos.

    La ConfeCat se opone rotundamente a distintas propuestas de modalidades de alojamiento turístico incorporadas a la futura nueva regulación de alojamiento turístico, las cuales considera que harán menguar la calidad en la prestación del servicio, y agravarán la convivencia entre la actividad turística y los vecinos y las fricciones que ya se han puesto de manifiesto ostensiblemente este último año, con especial incidencia en distintas zonas, por ejemplo, de la capital catalana.

    En este sentido, el presidente de la ConfeCat, Joan Molas, incide en que “nos preocupa que las medidas propuestas en este Decreto, en lugar de ayudar a solucionar los problemas de convivencia que hemos vivido este último año, especialmente destacados a la ciudad de Barcelona, ayudarán a agravarlos.”

    Igualmente, el presidente afirma que “la máxima preocupación del sector es la creciente oferta turística ilegal, especialmente la vinculada al alojamiento turístico, que pone en peligro la calidad y excelencia que han definido la apuesta de nuestra destinación.” En este sentido, la ConfeCat entiende que una nueva regulación tendría que atender y resolver esta grave preocupación. Y esto no quiere decir legalizarlo todo.

    Es por eso que la ConfeCat, delante de la necesidad de no agravar e incrementar las fricciones entre la actividad turística y los vecinos, considera que es del todo imprescindible primero ordenar correctamente las modalidades existentes actualmente, remarcando la necesidad de no incorporar nuevas modalidades de alojamiento turístico hasta que las actuales no estén controladas de manera efectiva.

    Asimismo, la entidad considera que no se pueden regular aquellas propuestas que son ilegalizables e incontrolables, pues sus afectaciones perjudicarían al conjunto socioeconómico de la ciudad; con afectaciones al estado del bienestar; propiciando la degradación del mercado laboral y de las garantías laborales; propiciando un alto nivel de fraude fiscal y de economía sumergida, con una reducción del impacto del gasto de un turista en la destinación; fomentando la competencia desleal; con una falta de control sobre la calidad y la seguridad y la pérdida de control sobre la carga de un destino; con graves afectaciones a las comunidades de vecinos, al desgaste y la desnaturalización del comercio del barrio, y con un impacto directo en el encarecimiento del precio de la vivienda que supone el desplazamiento de la población autóctona.

    Por otro lado, el sector turístico catalán anima al Gobierno de Cataluña a elaborar un Plan Territorial Sectorial turístico que estipule la ordenación que ha de regir al conjunto, el cual se considera indispensable para la constitución de una estructura de país equilibrada y harmónica con los ingresos generales de éste.