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Regina, el centenario hotel favorito entre intelectuales y literatos de la época y testigo vivo de la historia de la ciudad de Barcelona, celebra el día de Sant Jordi convirtiéndose en punto bookcrossing, una iniciativa que promueve la lectura, el intercambio de cultura y la interacción entre apasionados por la literatura. La forma de participación es tan sencilla, participativa y atractiva que, todo aquel que pase por el lobby, no saldrá con las manos (ni la mente) vacías.
Regina es un hotel lleno de historia y un rico pasado estrechamente ligado al mundo de las artes ya que en el pasado fue frecuentado por escritores, actrices y músicos que encontraron aquí un refugio discreto y bien situado.
Recuperar el esplendor de esa lejana época y fomentar el trasiego de gente buscando sus obras favoritas mientras dona otras que ya han disfrutado es, sin duda, una manera perfecta de celebrar la cultura. El punto de bookcrossing estará delante de recepción a partir del 23 de abril. Todo aquel que se acerque puede echar un vistazo a las obras y llevarse la que más le guste… eso sí, tendrá que dejar otra a cambio.
Además, todos los participantes podrán dejar por escrito sus recomendaciones literarias y servir de ayuda a otra persona en busca de nuevos títulos o descubrir su próximo libro favorito. Así de sencillo es adentrarse en el mundo de la literatura.
Para todos aquellos que no estén familiarizados con este movimiento, nació en marzo de 2001, cuando Ron Hornbaker, un programador norteamericano y amante de los libros tuvo una idea sencilla pero poderosa: ¿y si los libros pudieran viajar de mano en mano, moverse, trasladarse… como lo hace la gente? Él lanzó una web que favorecía este sistema a través del registro de libros para luego dejarlos en puntos clave de las ciudades y que la cadena se hiciera cada vez más grande.
Regina comparte el ADN de este proyecto y que va más allá del simple intercambio de libros. Este es un movimiento que promueve el acceso libre a la cultura, el compartir sin expectativas y sin esperar recibir nada a cambio, y el placer de sorprender y ser sorprendido. Por eso, todos aquellos que quieran dejar parte de su biblioteca aquí y curiosear o llevarse otras obras, son bienvenidos, sobre todo si, además, se dejan llevar por el ambiente del lobby del hotel Regina, uno de los más bonitos de la Ciudad Condal. Además, la guinda final dentro del marco de celebración de Sant Jordi se hará en colaboración con la Asociación Aura, quienes estarán de 13:00 a 15:00 el 23 de abril, repartiendo rosas y marcapáginas en el lobby para sus huéspedes y clientes.
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