Gastronomía

La terraza del Santo Mauro se suma con un menú para dos a Madrid a Cielo Abierto

El jardín, al que ya se puede acceder por el nº 19 de la calle Almagro, prepara una propuesta gastro especial para dos personas con la que vivir una experiencia inolvidable en buena compañía.

Con el buen tiempo a la vuelta de la esquina, las terrazas, jardines y azoteas de los hoteles de Madrid se preparan ya para convertirse en las protagonistas estivales del ocio y el disfrute capitalino.

Conscientes de su importante papel para aliviar los rigores del verano madrileño y reponer cuerpos y con sus variadas propuestas en torno a la gastronomía, los cócteles, las piscinas y la música, estos oasis urbanos, bajo el auspicio de la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid (AEHM), han puesto en marcha la quinta edición de la iniciativa #MadridACieloAbierto bajo el epígrafe “Atardece, que no es poco”.

Por ello, la terraza del Hotel Santo Mauro, el más recoleto place to be del verano madrileño y una verdadera joya decimonónica que durante todo el año ofrece solemnidad y pausa entre fuentes y árboles históricos, ha decidido sumar a su oferta habitual –con sus celebradas meriendas, aperitivos y desayunos tardíos de sábados y domingos como citas imprescindibles– una refrescante propuesta para el buen tiempo bajo el paraguas de esta iniciativa.

Del 2 al 18 de junio, además de poner a disposición de sus clientes la excepcional propuesta gastronómica del Santo Mauro en todas sus vertientes, desde las más formales a las más ligeras, la terraza del Santo Mauro –a la que ya se puede acceder directamente desde la Calle Almagro– se abrirá aún más al cielo madrileño con un plan especial diseñado para conseguir que una visita a este jardín siga siendo una experiencia completa, capaz de transformar el asueto estival en una experiencia excelente.

Durante estos días, la céntrica terraza del Santo Mauro ofrecerá a sus clientes un menú para dos personas, que incluye media ración de cecina, almeja fina aliñada, säm de anguila braseada, puerro en salsa verde, el famoso bikini de lomo ibérico con queso comté del chef Rafa Peña y su deliciosa milanesa de codorniz; además de cuatro copas de vino natural que los clientes podrán sustituir por refrescos, agua o cerveza, según su gusto.

En definitiva, una excusa más para disfrutar del buen tiempo en este oasis en pleno corazón de Madrid, el lugar perfecto para desconectar del estrés y vivir una experiencia inolvidable en buena compañía, disfrutando de la vida y del cielo madrileño a través de todos los sentidos.

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