Inspirado en los lounges más cool de verano, con dj en directo e ingredientes saludables, el brunch del Majestic Hotel & Spa Barcelona se reinventa de cara a los domingos de otoño. Los nuevos brunchs ya no acaban tras la comida, se estiran hasta la puesta de sol con la mejor música, cócteles digestivos y la panorámica más espectacular de la ciudad. El lujoso hotel barcelonés ha diseñado un concepto que aúna desayuno, almuerzo y merienda bajo el nombre de Afterbrunch.
Si la gastronomía mediterránea es la protagonista a primera hora, en su versión vespertina la atmósfera se transforma en un momento idílico con la mejor música de mano del dj Carlos U- Soul, vistas de ensueño desde la terraza La Dolce Vitae y bebidas personalizadas a cargo de sus profesionales bartenders, que han desarrollado cócteles digestivos para ayudar a bajar las delicias consumidas en el bufé del brunch, elaborado por el prestigioso chef Nandu Jubany (una estrella Michelin), asesor gastronómico de Majestic Hotel Group.
El Afterbrunch del Majestic tendrá lugar de 15 a 21 horas en La Dolce Vitae hasta que el clima obligue a trasladarlo a El Bar del Majestic. La estrella del Afterbrunch es el cóctel Julep del Rey: «Se trata de un cóctel muy fresco y digestivo elaborado a partir de cognac Remy Martin VSOP, licor Chambord, hoja de menta, sorbete de frambuesa, azúcar y hielo picado», explica su creador y director de bares del Majestic Hotel & Spa Barcelona, Alexandre Peyraud.
Pensado tanto para clientes del hotel como visitantes, El Brunch del Majestic ofrece una degustación de finas delicias a modo de bufé que incluyen aperitivos fríos y calientes, ensaladas y ahumados que se complementan con una parte de showcooking en la que el equipo de cocina elabora al momento risottos, huevos y exquisitos dumplings. Una experiencia gastronómica con un final de difícil elección frente a su variado bufé de postres. Para acompañar, una barra abierta de Moët & Chandon, gin-tonics y una cuidada bodega de vinos que aportan a la comida un sabor diferente, más divertido pero, sobre todo, más sofisticado.